sábado, marzo 31, 2007

Hoy no me puedo levantar


A las cinco cerraron la barra del 33. María esperaba a Mario. Cuando él llegó a casa, ella ya se había puesto en pie. Y yo un poco antes de cerrar la barra cogí mi coche y cerré mi último festejo cumpleañero seis meses más tarde. Mientras María mojaba las ganas en el café, yo me metía en la cama después de cuatro horas. Por mi calle sólo se veía a unos novios que se comían a besos. De Mario, ni rastro. Quizás se haya cogido un barco a venus. Y yo mientras en mi cama, intentando flotar; el sueño me hace pensar que después de tantos años de rotos nuestros lazos me cuesta tanto olvidarte, porque tú y yo, durante tanto tiempo fuimos tan especiales. Perdido en mi habitación, sin saber qué hacer, se me pasaba el tiempo en mi edredón removiendo tantos recuerdos, tantos motivos, tantos momentos, tantos lugares, tantas palabras, tantos sueños, que rescato cada 7 de septiembre. El nuestro, claro. ... Cuento uno, dos y tres y me quedo dórmido, porque me toca madrugar. Por fin. Aire. Y esta mañana sin descansar y con ojeras no me podía levantar. Ahora corro, termino de hacer las maletas, porque un año más la Semana Santa ha llegado y me marcho. Pero no a Nueva York, ni a Hawai ni a Bombay ni a ver al Dalai Lama. Me voy a Lanzarote, isla de naturaleza muerta. No me digas: Quédate en Madrid. Porque me voy. Confía. La fuerza del destino nos vuelve a juntar a todos y nos hace repetir después de tres o cuatro cines y conciertos. Y es que no se está mejor: Ya te necesito alrededor. http://www.youtube.com/watch?v=V28QGJCuhCE (todo lo que se dice en este post es pura "imaginación", no hay destinatarios)