jueves, febrero 01, 2007

Mi vida sin mi

¿Qué hay detrás de esta persiana? ¿Qué se mueve si levantamos sus solapas? Seguro que decenas de vidas que se fusionan con otras, que se mezclan, que comparten otras vidas y, que, quizás, sin saberlo algún día lleguen a encontrarse. Pero de nuestro lado está la nuestra. Nuestra vida. Nosotros mismos, que miramos como espectadores las vidas de los demás. Las admiramos. Las envidiamos. Las compartimos o las odiamos. He leído en menos de una semana algunas iniciativas de personas (Australia y EEUU) que han decidido poner su vida en venta: Trabajo, casa, amigos, parejas, hobbies, vacaciones, sentimientos, personalidad. Todo. Incluso hay páginas web que te facilitan el proceso de vender tu vida. Si vendes tu vida, me pregunto yo ¿Qué te queda? Tú ya no eres tú. Es tu vida sin ti. Quedan fuera los que llevan una doble vida, que también viven una vida sin ellos... pero los más aventureros, los menos trascendentales venden incluso su alma. No sabemos si al diablo, pero aseguran que la venden. Menos mal que todo esto es un juego, porque lo más inherente a cada uno de nosotros nadie nos lo puede usurpar, a voluntad nuestra. Es la personalidad. Por mucho que se empeñen eso no nos lo quita nadie. Y yo, la verdad, no quiero vivir mi vida sin mi.