viernes, junio 16, 2006

Volando voy

... bueno después de una semana llena de anécdotas y de cosas interesantes voy a tomarme un kit kat durante cuatro días y me marcho a las Canarias a descansar, a tomar el sol, bañarme en el Atlántico, ponerme morenito, dormir, despreocuparme de todo. A no hacer nada que implique movimiento físico o mental.

Por lo demás esta semana he descubierto lo interesante que debe de ser eso del periodismo gastronómico y el dolor de estómago que puedes tener durante dos días por comerte nueve platos seguidos, aunque sólo sea probando un poco de cada. Que si sopa a la lombarda, que si asado medieval, buñuelos a lo Carlos V, ensalada de conejo escabechado a la miel y todo un lujo de comidas innombrables... comes por la gorra, te enteras de cosas superinteresantes, pasas el día ameno y luego preparas un texto para un reportajito sobre lo que has visto, oido y sobre todo catado by the face. Muy recomendable.
Qué decir de esta semana friki... además de lo anterior, pues que hice mi pinito a la cámara. Eso fue muy friki. Ya veremos. De momento... ahí está que ya es bastante. Y quién sabe si en esta semana llegamos a romper con el frikismo y resulta que... uhmmm... por ejemplo a partir del sábado soy propietario.
Yo, de momento, me marcho pa las Canarias a todo eso que he dicho antes.

domingo, junio 11, 2006

Esas tardes frikis de un domingo de curro

¿Quién decía que el Séptimo día "alguien" descansó? No habré sido yo, ni Alonso, ni Nadal, ni nuestro equipo nacional en el Mundial de Alemania, porque al menos yo, esta mañana me he levantado con los ojos como las pelotas, de tenis, de la final que ha ganado Nadal esta tarde. Y después de diez horas dedicado al mágico y sorprendente mundo del compactado y la e-news estoy cansado, así que digamos que el séptimo día, a eso del anochecer "quien fuera" se tomó un kit kat.
Sin embargo, ¿Qué sería de mi si no hubiera estado hoy en T5? El pasado 25 de mayo se celebró el día de los frikis. Y todos llevamos dentro de nosotros un poco de frikismo que nos corre por las venas. Y hoy he dedicado parte de la tarde a una de esas frikadas. Gracias a otra gran friki, como yo, de las canciones de nuestra infancia, esas canciones con las que nos comíamos el bocata de Nocilla o hacíamos los deberes al volver del cole. Todas toditas las letras, cantadas originales, aparecen en una página web, que cedo al resto de frikis de esas series ochenteras, aunque también de los 90, y que escuchábamos en las difuntas cintas. La web se llama www.casadeedu.com y de ahí redirecciona a todo el universo infantil de Dragones y Mazmorras, Sherlock Holmes, Campeones, Misha, Dos fuera de serie, Dragon Ball, Dragon Ball Z, Pumuki, La Superabuela y así hasta muchas y muchas canciones. Es una frikada, pero merece la pena... esos Diminutos "que no sabes donde están", los pitufos "pitufando" y esos Fragel o los electroduendes o Yupi en su nave. Bueno, bueno... qué momentazo...
... y hablando de frikismo, alguna mente avispada, como la mía, se ha percatado de que la primera tormenta tropical de la temporada lleva el nombre más adecuado. Si el verano pasado se llevaba el de Rita o el de Katrina, este empieza con el de Alberto. Ahí es nada. La primera tormenta, que para algunos seguro que es un tormento, se llama así y se ha formado en Cuba. ¿Por qué será que estos, como diría una famosa, "presuntos" perciben su radio de acción en Fuencarral?
Con esto ya me despido, porque estoy muerto. Mañana toca madrugar y hacer otro poquito el friki a primera hora del día para despertar las neuronas.

Mi ciudad

Algunas tardes me gusta enfundarme los cascos de mi Nokia y bajar a Madrid a darme una vuelta mientras escucho un poco de música. Y este sábado es lo que he hecho. Llego hasta Plaza de España en metro y subo Gran Vía hasta Callao y luego me meto por Preciados y bajo a Sol. Después cojo la Calle Mayor que me lleva sin querer, como algo que no tiene remedio, hasta el Palacio Real. Ahí, cuando voy acompañado me gusta tumbarme al sol.

Pero esta tarde he descubierto la cantidad de cosas que pueden pasar en un espacio tan pequeño. En Sol había unos manifestantes a los que no he entendido muy bien. Se supone que se manifestaban para protestar por la negociación con ETA, pero todos enarbolaban banderas de España y coreaban y gritaban consignas que no tenían nada que ver con el lema de la manifestación. Pero, bueno, ellos eran felices en la Puerta del Sol, a lo suyo y con su historia. Yo, con la mía.

Cuando cogí la Calle Mayor seguí encontrándome con algunas personas que enrrollaban sus banderitas como un tesoro y pa casa. Y ya antes de llegar a la Plaza de la Villa he descubierto que han peatonalizado todas las callejuelas de los Austrias y eso le daba otro aire al centro. Había mayores y pequeños, solteros y parejas, españoles y turistas en las terrazas o paseando. Y por el suelo, como si de un paseillo quijotesco se tratase, he ido recopilando frases entresacadas del Quijote.

Y al final de mi andadura, y sin Sancho cubriéndome las espaldas, y con Rocinante en el taller, no he llegado a un molino ni he visto a una Dulcinea. El camino del Siglo de Oro me ha empujado a las puertas del Palacio Real y sus jardines. Y allí unos dormían, otros charlaban en el césped, algunos patinaban, los visitantes se hacían fotos y yo miraba a todo el mundo. Y en los bancos de piedra del Palacio, que comunican con la Cuesta de San Vicente y con los jardines de Sabatini, había parejas dedicándose la tarde del sábado, ajenas a las protestas de unos cientos de metros atrás y a mi paseo. Había Quijotes y Dulcineas leyendo, mirándose y besándose, pero también en esos mismos bancos, que abrazan una fuente pequeña, había un par de Quijotes enamorados y dos bancos más a la izquierda otras dos Dulcineas, sin lanzas, y sin piedras con las que hacer su pared.

Ya en la Cuesta de San Vicente las banderas blanquiazules y un acento ché, que me ha transportado en cuestión de metros a la Argentina, me han llevado hasta la antigua Estación del Norte. El local Locos por el fútbol había reunido a un buen grupo de argentinos de Madrid para ver jugar a su selección esta tarde en el Mundial. Y allí estaban ellos disfrutando a ritmo de tango la victoria de los suyos frente a Costa de Marfil. Y yo mientras me he quedado esperando a que llegara mi autobús. Cuando venía para casa me he dado cuenta de que la luna llena de hoy se parece mucho a la del post de anoche... y así ha terminado mi paseo quijotesco.

sábado, junio 10, 2006

My immortal


A las 01:12 de la madrugada del viernes al sábado no conozco una canción más íntima, que recoja más y te pegue esa punzadita en el estómago que la de Evanescence ¿Cuál? My immortal. No sé colgar música en el blog, pero quien lo vea, y no la tenga, que se la baje y la escuche a media luz, en la cama, con relax, con la mente en blanco o con ideas disipadas por la habitación... pienso en una foto que ilustre el momento y me cuesta bastante encontrar una... se me ocurre una luna... en eclipse, que impone más...

viernes, junio 09, 2006

Una tormenta

Hoy hace una tarde de esas que me gustan, de las que rompen con la monotonía del calor, ese calor sofocante que se autocoloca en la cabeza en forma de visera o te envuelve cual burbuja y te acompaña por donde vayas.

Cuando he salido de trabajar olía a tormenta y llovía. Era como si el calor hubiera corrido a recogerse al inframundo. Se ha quedado una tarde melancólica, pensativa. De vísperas de verano, de mirarse a la cara y decirse todo en lo que tarda en aparecer el rayo. Y cuanto más fuerte caía la lluvia más fuertes se hacían también los pensamientos.
Rota la monotonía y dejándome llevar por las gotas de lluvia que caían enloquecidas sobre el asfalto he dejado volar entre ellas mis pensamientos. Y eran pensamientos que nacían mojados, probablemente de alguna nube que a lo largo de la tarde también se ha formado en mi cabeza, producto del calor que he ido acumulando. No ha habido truenos, ni rayos. Ha sido una tormenta silenciosa mientras esos pensamientos resbalaban y caían al vacío perdiéndose sin que nadie se diera cuenta.
Mi tormenta caía sobre un terreno ya mojado y ha ido formando charcos de palabras y balsas de frases perfectas, con todo su sentido, cargadas con su sentimiento y con el contenido exacto, pero se han quedado en eso: Silencio. Las mejores palabras son las que nacen y se quedan en el silencio de nuestras tormentas. Las que sólo escuchamos nosotros...
... porque a menudo la caja de los truenos de esas tormentas contiene las palabras que nunca nos atrevimos a decir, sentimientos y pensamientos tan íntimos que las personas que tenemos al lado, que han pasado por nuestra vida, fugaces como tormentas de verano, seguramente no merecen saber. Nos estarían robando injustamente algo de nosotros, algo que nunca sabes cuando es justo o no es justo dar y que tantas veces te has equivocado dando.
Esa caja de los truenos contiene pequeños papeles arrancados de un cuaderno en el que hemos escrito nuestras lágrimas, cartas que confiesan en exclusiva lo que sentíamos en ese momento, letras de canciones que se hicieron parte de nosotros y que han quedado, todas, en silencio. Pero tardes de verano como ésta, tardes de tormenta como la de ahora entreabren esa caja de los truenos... y lo hacen en silencio hasta que un día se alejan y desaparecen quedando en el recuerdo.

miércoles, junio 07, 2006

Atardeceres como amaneceres

Cuando me iba a la cama y habiendo sobrevivido a la apolíptica cita con La Profecía me pregunto quién podría resistirse a un atardecer así en una playa. Imaginaos por un momento en la orilla de esta playa, sentados en vuestra toalla con la compañía que más deseéis en este instante. No hay palabras. Sólo miráis al frente con el silencio de quien os acompaña. ¿Quién dice que un atardecer no es el amanecer de un nuevo día? Yo creo que sí.

martes, junio 06, 2006

El agua

Dijo Zapatero en el debate del estado de la nación, sin decir ni cómo ni cuándo, que el problema del agua se va a acabar en España. Y yo por más qué he pensado, que tampoco me he dedicado mucho a hacerlo, no se me ha ocurrido como va a solucionar este hombre la escasez de agua. Con su peculiar complejo de Mesías lanzó esa frase como la que decía en el anuncio hace muchos años que "el frotar se va a acabar".
La verdad es que este verano no tenemos agua, así que nos toca ahorrar. Aunque ha llovido, sólo lo ha hecho en el norte. En el resto seguimos igual o peor, por ejemplo en Madrid. Hace un año teníamos dos puntos más de agua en las reservas, es decir un 60%. Y ahora casi tenemos un 57%. La gente está llenando compulsivamente piscinas, regando jardines, vuelve de nuevo a dejar correr el agua en el grifo, en la ducha... La Espe, tan ingeniosa como siempre, ha levantado las restricciones, porque considera que tenemos suficiente para todo el verano. ¿Y cuándo llegue septiembre qué? Esta mujer nunca debió de leer la fábula de "La cigarra y la hormiga", así que en la medida que podáis y os acordéis de esto: Ahorrad agua este verano, porque no solo no estamos mejor sino que hemos ido a peor. Y lo siento mucho por ZP, pero me da en la nariz que el problema del agua no se soluciona en dos días.
A falta de agua en verano, para eso ya están los ciclones o huracanes. Que pal caso es lo mismo. La nueva temporada empezó el pasado uno de junio. Y ésta va a ser muy importante, porque la temporada pasada fue la más larga y devastadora de toda la Historia. A nadie se le ha olvidado Katrina, ni Rita, ni Stance... Para los que no lo sepáis el Centro Nacional de Huracanes, que tiene sede en Miami, elabora anualmente una lista por orden alfabético para asignar un nombre a cada uno de los ciclones que se van formando en el Atlántico. Muchos de ellos no llegan a convertirse en huracanes y se quedan en simples tormentas tropicales o se deshacen al tocar tierra, porque pierden humedad y por tanto fuerza. Todos esos repiten nombre al año siguiente o dicho de otra manera, los más buenos de la clase pasan de curso. Otros se quedan, los peores, como Rita o Katrina. El hecho de que sean nombre de hombre o de mujer es indiferente. La lista se confecciona alternándolos en varios idiomas: Inglés, francés y español. En 2008, creo, ya hay uno, el que tiene la letra M, al que han dado el nombre de Marcos, así que echad a temblar, porque ése será un Fuerza 5 je je je. ¿Y qué pasa si se acaba la lista? Pues que se tira del alfabeto griego, que es lo que tuvo que hacerse el año pasado. Alfa, Beta, Gamma...
Para nosotros los huracanes han empezado a tener importancia, porque el año pasado, la primera quincena de octubre se formó el ciclón Vince, que en lugar de seguir su trayectoria normal en diagonal, es decir, desde las costas africanas hasta el Caribe o EEUU, se desvió y vino a parar a nuestro país. Pasó a menos de mil kilómetros de distancia de las Islas Canarias. Los flecos de Vince causaron cientos de destrozos en el archipiélago. Al llegar a las costas de Huelva y Cádiz, ya como tormenta extratropical, provocó lluvias torrenciales y al adentrarse en la península alivió algo la sequía. Pero este año es impredecible y dado que el pasado fue tan activo y los huracanes empezaron a formarse en condiciones más bajas de humedad y temperatura nadie puede asegurar que su comportamiento esté cambiando y nos tengamos que familiarizar con ellos de ahora en adelante. Cosas del cambio climático. Quién sabe si ZP se refería a uno de estos ciclones en una de sus profecías mesiánicas.
De momento, y por si acaso, ahorrad agua. Otro día os explico cómo se forma un huracán. A todo esto hoy es 6/06/06... uhmmm, qué interesante...

La Feria del Libro


Esta tarde estuve paseando por el Retiro y aproveché para hojear los libros de la Feria de este año. Hacía un calor abrasador, pero a mí que me gusta eso de que el sol me abofetee he paseado desafiándolo durante un buen rato hasta que al final se ha retirado del duelo y la sombra ha dado paso a la tregua.

No he podido evitar, entre tanto libro, acordarme de la prueba para los Informativos de la Sexta. Yo, que no tengo nada contra Eduardo Mendoza, no voy a olvidar su nueva novela "Las elecciones primarias", que ya va por su segunda o tercera edición. Esta fue una de las preguntas del test, que tenía un total de 50. Preguntaban cuál era la novela recientemente publicada por Eduardo Mendoza, al cual no leo, desde que cayó en mis manos La ciudad de los prodigios y tuve que abandonarlo :-( Las otras opciones eran Abril Rojo, La catedral del mar y La velocidad de la luz. En fin, que hoy me he hartado de ver las cuatro novelas con sus respectivos autores en casi todos los puestos de la feria.
Al final he comprado dos libros. Uno de ellos es de Tadeusz Borowski "Nuestro hogar es Auswitchz". Supongo que todos habréis respirado el ambiente de las cámaras de gas y sentido el dolor en los muros de fusilamiento de cualquier campo de concentración al leer algún testimonio. No he podido resistir la tentación de tener otro en mis manos. Nada menos que de Auswitchz. Os recomiendo si no lo habéis leido que busquéis "Si esto es un hombre" de Primo Levi, porque es el testimonio más real y más fácil de sentir que os vais a encontrar en un libro. El segundo que he comprado no tiene nada que ver con éste primero. Es "Cuentos Europeos de Fantasmas". Son varios relatos, recopilados en este libro, con bastante filosofía y metafísica "para explicar lo que de imaginación tiene la muerte".
Creo que son interesantes mis elecciones literarias para este verano. Lo que tengo claro es que no se me va a olvidar Eduardo Mendoza y Las elecciones primarias. Tatuado se me ha quedado en la memoria.

lunes, junio 05, 2006

Cuñaaaaaaaaaaaaaaaaaoooo


... en fin, que buscando una fotito para el post anterior pues me he encontrado estas buenas mozas, pongamos que senegalesas, aunque otra parte de mi diría que son de Kenia... de qué se estarán riendo, me pregunto :-) ¿será del gobierno al que se le han colado un par de primas suyas, tres sobrinos y seis parientes lejanos más? ¿acaso enseñan las caries o los huecos de los piños que les faltan para un implante? ¿corearán con Aragonés "a por ellooooooos oe, a por ellooooooos oe...? ¿serán la versión del cuñao en el prime time senegalés? Qué incertidumbre de lunes... a lo mejor solamente posan y dicen patata en su idioma o de la Vega, que como se hizo un tour africano. Ains.

¡Qué despropósito!

Empieza un mes nuevo para acabar el primer semestre del año. Y desde que no escribo, hace casi diez días, han pasado tantas cosas, mejor dicho, han ido y venido tantas de esas pequeñas cosas que hacen de mi vida mía, que sería difícil ennumerarlas todas. Y pensando en eso esta mañana he meditado si soy un auténtico desastre y un despropósito de blogger, o solamente lo aparento, aunque a mi blog pongo por testigo que todos los días tengo la intención firme de dedicarle unos minutines. Lo que pasa es que me lo planteo mal.

Digo yo que no podemos estar siempre pensando en tareas u obligaciones, y es que a mí eso me agobia mucho. Mejor dicho soy la típica persona que se autoagobia sin presiones externas. Como diría nuestro refranero popular, soy como Juan palomo que yo me lo guiso y yo me lo como. Y quienes me conocéis bien, de tantos o algunos años de andaduras quijotescas, sabéis a lo que me refiero. Esto de ser la típica persona que se propones mil hazañas y al final emprende la mitad y deja un cuarto a medio camino me crea agobio y desazón. Así que para este verano creo que me voy a proponerme a mí mismo hacerme un IKEA: Redecorar mi vida con poquitas cosas pero cumpliéndolas todas toditas.
Volviendo al tema de las obligaciones, no agachéis la cabeza, porque a todos nos pasa algo parecido: Este año voy a cambiar de trabajo, este verano voy a mandar el curriculum a no sé qué sitios, esta semana iré al médico, el mes que viene voy a ir al dentista, este fin de semana voy a quedar con "Rita" porque siempre lo dejo para otro día, de este verano no pasa qué visite a no sé quién que vive en el culo del mundo... y luego ya están las tareas confesables que siempre yo, uno mismo que teclea a estas horas en el post, deja para otro momento indenifido, infinito o cuando ya no hay más remedio: Voy a escribir en el blog sobre esto que me ha llamado la atención y no lo puedo dejar pasar... voy a ir al médico a ver el bultito ese para que me lo mire, voy a ir cortarme el pelo, voy a hacer los trabajos del doctorado, voy a volver a llamar al taller, no voy a enfadarme de nuevo sin contar hasta diez en siete idiomas distintos, voy a sacarme un billete de avión y definitivamente, sólo o con compañía, voy a ir a Londres...
No se puede hacer tantos propósitos y luego no cumplirlos. Como nos decían en el colegio: Despacito y buena letra, que hacer las cosas bien importa más que el hacerlas... y aprovecho para lanzar mi propósito de mañana: Escribir sobre el tema del agua y la temporada de ciclones. Mu interesante, no sea que otro Vince nos visite este año o que en invierno nos tengamos que beber el agua de las piscinas.